Salir de kuba.. como sea

Después del triunfo de la Revolución, salir de Cuba se ha hecho algo normal, es más, el deseo por salir del país es algo normal. Infinidad de cubanos han vivido con la esperanza de poder emigrar, unos lo logran, mientras otros siguen esperando la oportunidad para poder hacerlo. Las vías han sido diversas, desde legales hasta ilegales, por mar y por aire. Por suerte o por desgracia estamos rodeados de agua.

Hace unos días un joven cubano de solo veintitrés años, en su intento por escapar de la isla se encontró con la muerte en el tren de aterrizaje de un avión de Iberia. Era una muerte segura. Otros, antes que él, utilizaron la misma vía, y salvo alguna excepción, el resultado fue el mismo. Es posible que dada su juventud no lo supiera, o que simplemente su desesperación le jugara una mala pasada, confiándose a la buena suerte o al amparo de Dios.

Si bien es cierto que la emigración ha sido una constante del cubano en las últimas cinco décadas, a partir de los años noventa, con lo que se dio en llamar Período Especial, el éxodo ha sido sistemático, contante e ininterrumpido. Exceptuando el de los balseros en el año 1994, no ha habido ningún otro que se haya producido de forma masiva, algo que preocupa mucho a los Estados Unidos y que ha tratado de evitar a toda costa; sin embargo, han surgido nuevas fórmulas para salir del paraíso terrenal, porque dicen que Dios aprieta, pero no ahoga. A las famosas cuotas anuales que otorga el gobierno de Estados Unidos por concepto de reunificación familiar fundamentalmente, se le agregó el sorteo o lo que comúnmente se ha conocido como “el bombo”. Surgido en 1994, se basa en la selección de candidatos que cumplan determinados requisitos, por ejemplo, de edad y nivel escolar. Todos los cubanos que cumplieran los requisitos establecidos podrían aspirar a optar por una plaza del famoso sorteo.

La apertura que se le dio al turismo internacional a partir de la década del noventa, hizo crecer de forma exponencial los matrimonios de cubanos con extranjeros. Muchos se basaron en el amor, otros en el interés. El matrimonio se convirtió en una forma segura para salir del país, incluso el gobierno concedió con relativa facilidad el denominado Permiso de Residencia en el Exterior (PRE), lo que se traduce en la posibilidad de radicar indefinidamente fuera del territorio nacional sin perder lo que se tenga de propiedades en Cuba ni el derecho a retornar, algo que seguramente pocos han hecho. Como es de suponer, con el tiempo las restricciones para conceder el PRE se fueron haciendo mayores, pero curiosamente, por el momento se ha respetado bastante el estatus a quienes se les ha concedido. Los matrimonios siguen siendo una opción, a pesar de que con el paso del tiempo ha aumentado el nivel de exigencia, sobre todo por parte de los países receptores en el momento de conceder los visados y permisos de residencia.

Los viajes al extranjero por invitación han sido otra forma de decir adiós al terruño natal. La flexibilización del gobierno a las salidas por éste concepto la han convertido en una vía segura. Italia, España, Chile, Argentina, Canadá, China, Panamá; de infinidad de países, cercanos o distantes geográficamente y en cuanto a costumbres y culturas, llegaron las “cartas de invitación”. No importa el sitio cuando lo verdaderamente importante es poner los pies fuera de Cuba. Las misiones internacionalistas, básicamente de personal de la salud, le ha dado la posibilidad a no pocos compatriotas de concretar el deseo de encontrar una vida mejor, aunque en éste caso es verdad que exponiéndose a un mayor riesgo, incluyendo el calificativo de desertores, con lo cual se verán expuestos a las consiguientes represalias del gobierno, sobre todo con la familia, dificultando la reunificación, además de que su “traición” la deberán pagar con la prohibición, por tiempo indefinido, de entrada al país. Las becas concedidas por entidades extranjeras u organismos internacionales, también han servido para el mismo propósito. Las deserciones en las delegaciones deportivas, algo que durante un tiempo prácticamente despareció, han vuelto a ponerse de manifiesto.

Las excelentes relaciones que se han establecido entre los gobiernos de Cuba y el de Ecuador después de la llegada a la presidencia del cercano Rafael Correa, convirtieron al país andino en el destino de miles de cubanos. Inexplicablemente, para viajar no se necesitaba de visado, algo que es como una tentación, como la sangre para los tiburones. En Ecuador se ha producido un fenómeno interesante: mientras cientos de miles de ecuatorianos emigran (no para Cuba) en busca de trabajo y de una mejor calidad de vida, miles de cubanos han optado por establecerse allí, tal vez con la esperanza de que les sirva de puente para llegar al destino soñado, Miami. En el país andino se ha denunciado que se producen matrimonios ficticios de cubano(a)s con ecuatoriano(a)s para lograr la residencia y la nacionalidad.

El avión se ha convertido en el medio de transporte más utilizado por los emigrantes. A principios de la década del dos mil, a través de Rusia se estableció una vía para llegar a Miami. Nunca se pisaba suelo en la mayor de las ex repúblicas soviéticas, sino que en un país intermedio se enrumbaba al norte revuelto y brutal. La operación funcionaba a la perfección hasta que se terminó.

Los españoles siempre han sido bien recibidos en Cuba, a pesar de que nos tuvieron colonizados durante cuatro siglos, exterminaron a los indios y se llevaron el poco oro que encontraron. Pero el cariño a la Madre Patria se elevó a la máxima potencia cuando el gobierno español aprobó conceder la nacionalidad a los hijos y nietos de los ciudadanos de la ex metrópoli nacidos en Cuba. Con esto se abrió otra puerta a la emigración.

Menos frecuente ha sido la salida por mar, aunque no ha dejado de emplearse. La aplicación a rajatabla de “pies secos-pies mojados” convierte ésta vía en insegura, además del riesgo que siempre entraña atravesar el Estrecho de la Florida en embarcaciones no adecuadas. Así y todo se mantiene la incursión de lanchas rápidas pagadas por familiares para recoger pasajeros en las costas de Cuba.

Las ilusiones de no pocos cubanos se han reducido desde hace años a poder salir de su país, independientemente al riesgo que eso supone y la incertidumbre de lo que puede pasar. Riesgo e incertidumbre parecen ser mejores que la frustración de vivir en un país que su gobierno no ha logrado cumplir lo que prometió.

una de la maneras mas simpatica creo que es ganarse..el Bombo:

https://aserekbola.forumieren.com/t92-ganar-el-bombo

La candela es, cuando te llega el bombo y no tiene el dinero para salir

arcoiris ha scritto:La candela es, cuando te llega el bombo y no tiene el dinero para salir

y como minimo..cuanto dinero necesitaria?
me imagino para comprarse el boleto dell'avion y ya?

Tiene que sacar el pasaje
allá en la Yuma te ayudan las organizaciones, por ejemplo la iglesias
pero también atrás de esto, hay mucho negocios sucios
Gente que vive en la Yuma te presta el dinero y después hay que devolverlo con el 20% de interés
Los Montis cubanos que viven en la Florida

arcoiris ha scritto:Tiene que sacar el pasaje
allá en la Yuma te ayudan las organizaciones, por ejemplo la iglesias
pero también atrás de esto, hay mucho negocios sucios
Gente que vive en la Yuma te presta el dinero y después hay que devolverlo con el 20% de interés
Los Montis cubanos que viven en la Florida

pensaba peor..

Bueno, el 20% no es que es poco
Ademas, tu llega en un país que no conoces ya con esta deuda, no tienes ni trabajo ni casa y no sabes como comer, porque muchos tienen familiares, pero hay mucho que no.
La otra vez, estaba chateando con una muchacha que tuve que irse a dormir en una asociación católica, ella y la hija por 9 meses en Texas, porque no sabia donde ir, ahora después de 18 meses de USA, esta loca para regresar en Cuba, donde tenia su casa, su vida y su comida cada día

arcoiris ha scritto:Bueno, el 20% no es que es poco
Ademas, tu llega en un país que no conoces ya con esta deuda, no tienes ni trabajo ni casa y no sabes como comer, porque muchos tienen familiares, pero hay mucho que no.
La otra vez, estaba chateando con una muchacha que tuve que irse a dormir en una asociación católica, ella y la hija por 9 meses en Texas, porque no sabia donde ir, ahora después de 18 meses de USA, esta loca para regresar en Cuba, donde tenia su casa, su vida y su comida cada día

mmhhhh
no es facil la vida de la.. monja..